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Rogue Community Health se complace en anunciar que los miembros del Rogue Challenge están participando en el Collaborative to Advance Social Health Integration (CASHI), una colaboración de aprendizaje de 18 meses de Commonwealth Fund y Health Leads diseñada para abordar las necesidades de salud social insatisfechas de los pacientes como estándar de atención de salud de calidad. A fines de mayo, los representantes del equipo viajaron de Medford a Boston para compartir información en la primera sesión de aprendizaje de Health Leads sobre los logros de CASHI.
Health Leads es una empresa social ubicada en Boston, Massachusetts, que trabaja con organizaciones de atención médica líderes en todo el país para crear intervenciones de necesidades sociales sostenibles, de alto impacto y rentables que conectan a los pacientes con los recursos comunitarios que necesitan para estar saludables, desde alimentos hasta transporte a los beneficios de atención médica. La subvención CASHI apoya a las agencias asociadas de Rogue Community Health y Rogue Challenge: Family Nurturing Center, Rogue Valley YMCA, Southern Oregon Goodwill y Southern Oregon Head Start.
The Rogue Challenge se unió en 2016 para desarrollar un sistema en el que aquellos que buscan servicios pueden registrarse en cualquier ubicación asociada y tener acceso a los servicios proporcionados por todos los socios a través de un proceso de referencia de circuito cerrado. La intención de la colaboración es agilizar el proceso de admisión y reducir la re-traumatización de los clientes que pueden tener que compartir su historia una y otra vez para obtener los servicios necesarios. La idea es crear un sistema de registro más amable, más simple y más eficiente para facilitar el proceso de derivación de los recursos que las personas pueden necesitar para avanzar hacia el auto-empoderamiento, la autoeficacia y, en última instancia, la autosuficiencia.
“The Rogue Challenge integra el acceso a programas y servicios de agencias asociadas para ayudar a nuestros pacientes y clientes a interactuar sin problemas con el sistema con la administración de casos compartida”, explicó William North, director ejecutivo de Rogue Community Health. El objetivo es un proceso de admisión simplificado que esté informado sobre el trauma y que satisfaga las necesidades de los determinantes sociales mientras se mantiene la dignidad y el respeto mientras las personas avanzan hacia la independencia. El Rogue Challenge es el "eje" de este esfuerzo colaborativo de proveedores y está coordinando todas las derivaciones. "El lugar donde las personas viven, trabajan y juegan son determinantes sociales importantes cuando se considera la salud y el bienestar en general", dijo North, "y estamos dedicados a conocer a las personas donde están con compasión".
Las personas que ingresan como miembros del Rogue Challenge son evaluadas para detectar necesidades sociales insatisfechas como inseguridad alimentaria, estabilidad en la vivienda, seguridad doméstica, educación y / o logro laboral, salud conductual y transporte, así como también para problemas médicos como diabetes e hipertensión. El acceso a apoyo para satisfacer las necesidades sociales descubiertas en este proceso es una prioridad.
En consideración a la participación en la iniciativa Health Leads, los socios de Rogue Challenge tienen acceso a la experiencia de socios nacionales, un período de compromiso intensivo de 18 meses y recibirán asistencia técnica para el desarrollo de casos de negocios como parte del apoyo de CASHI. El resultado final será un enfoque basado en evidencia para financiar y escalar el continuo de los determinantes sociales de la salud entre los socios comunitarios.
Años de investigación sobre los determinantes sociales de la salud (DSS) han demostrado una conexión innegable entre las necesidades sociales insatisfechas y la mala salud. Solo el 10% de los resultados de salud se atribuyen directamente a la atención médica, mientras que cerca de 70% de los resultados de salud se deben a factores sociales, ambientales y de comportamiento. El saldo es atribuible a la genética. A pesar de este conocimiento, Estados Unidos gasta desproporcionadamente más en atención médica que otros países y con peores resultados. El gasto en salud por persona en los EE. UU. Fue $10,348 en 2016, 31% más alto que Suiza, el siguiente país que más gasta per cápita. La evidencia sugiere que abordar los SDoH puede reducir los costos y mejorar la salud.